Contabilidad Electrónica y multas del SAT por incumplimiento

En los últimos días, en Internet, ha surgido información sobre una multa impuesta por el SAT a un contribuyente debido a la falta de envío de la contabilidad electrónica. Dicha sanción se encuentra establecida en el Código Fiscal de la Federación. A continuación, se presenta un extracto de la infracción y la multa contenida en el documento que está circulando en la web, junto con el plazo original para el envío de la contabilidad al SAT.

Multas aplicables a la contabilidad electrónica

Las multas respecto a los asientos contables y el envió de la contabilidad electrónica son:

Es importante recordar que las facultades de la autoridad para revisar al contribuyente vencen en un plazo de cinco años de conformidad con el artículo 67 del Código Fiscal de la Federación.

Artículo 67.- Las facultades de las autoridades fiscales para determinar las contribuciones o aprovechamientos omitidos y sus accesorios, así como para imponer sanciones por infracciones a las disposiciones fiscales, se extinguen en el plazo de cinco años contados a partir del día siguiente a aquél en que:

III. Se hubiere cometido la infracción a las disposiciones fiscales; pero si la infracción fuese de carácter continuo o continuado, el término correrá a partir del día siguiente al en que hubiese cesado la consumación o se hubiese realizado la última conducta o hecho, respectivamente.

Conclusión

El cumplimiento de las obligaciones fiscales, como el envío de la contabilidad electrónica al SAT, no es solamente una responsabilidad legal sino también un componente crucial para la transparencia y la adecuada gestión fiscal de cualquier contribuyente. La multa aplicada por el incumplimiento, como se destaca en el extracto del Código Fiscal de la Federación, no solo conlleva un impacto económico directo, sino que también puede afectar la reputación y la operatividad de los negocios.

Además, el plazo de cinco años para que la autoridad ejerza su facultad de revisión subraya la importancia de mantener un registro adecuado y constante de las operaciones contables. Es vital que los contribuyentes estén al día con estas prácticas no solo para evitar sanciones sino para asegurar la salud financiera a largo plazo de sus empresas y actividades económicas.